La empresaria y exgerente de la inmobiliaria Marka Group, Sada Goray Chong, asegura haber pagado más de S/ 4 millones de soles al exjefe del Gabinete de Asesores del Ministerio de Vivienda, Salatiel Marrufo Alcántara. Dinero que habría sido destinado al presidente Pedro Castillo, para pagar coimas.
Desde el extranjero, la empresaria contó al diario El Comercio, que fue extorsionada por Salatiel Marrufo, a quien dice haber conocido recién en una comida el día 23 de agosto del año pasado. “Me lo presentaron porque me dijeron que ellos querían conocer de qué se trataba la vivienda social en el país. Y entendí que ellos ya sabían que MarkaGroup era una de las empresas más grandes de Techo Propio en la modalidad de adquisición de vivienda nueva”, señala.
“Entonces, lo que ese señor me pidió es que ayudara a la comunidad shipiba de Cantagallo. Armamos un equipo técnico junto con el Ministerio de Vivienda y empezamos a trabajar en favor de esa comunidad”, agrega.
Pero fue en una cuarta visita que Salatiel Marrufo le pide la suma de S/ 4 millones de soles, para “cumplir un montón de favores políticos y que, a pedido del presidente, me vino a solicitar esos soles”, cuenta Goray Chong.
Según el relato de la empresaria, Marrufo le contaba que el dinero era para una planilla para el presidente y sus hermanos. “Le llegué a cumplir los cuatro millones de soles. Pero en total fueron 4 millones más veinte mil dólares que me pidió para comprarle un carro a un sobrino del presidente”, precisa.
Además, Goray Chong menciona que solo mantenía conversaciones con Salatiel, porque para ella él era el ministro de Vivienda. “Para mí, él era el ministro y él me decía que hablaba directamente con el presidente, a quien le decían “23” y a la plata le decían “cafés”.”.
Según Sada Goray, entregó en siete oportunidades, diferentes sumas de dinero, por temor a represalias en su contra por tratar con personas con poder. “Todos creen merecer ser parte de nuestros negocios. Y cada vez que a nosotros nos piden un cupo, nos extorsionan, si no cedemos a la presión, sabemos que esto va a llegar sabe Dios hasta dónde y que esto nunca va a terminar, porque te traban y te traban y te cierran”, dice.