Walter H. Wust ofrece en Perú desde el Aire un despliegue gráfico de la geografía de nuestro país inédito. En trance hinóptico, CARETAS publica siete nuevas fotografías de espacios feraces e insólitos. Copie y pegue en Google Earth la coordenada que precede a cada reseña escrita por el autor y haga volar su imaginación.
El libro compendia una década de fotografías aéreas de los más asombrosos parajes del territorio nacional. No se trata de imágenes dron; cada captura fue una epopeya aérea. Las fotos del desierto y mar de Paracas fueron tomadas desde un avión ultraligero que se aventuró en la península iqueña cuando amainaron los vientos huracanados tan comunes en esa parte del litoral peruano. “Tuvimos que aterrizar en la Panamericana Sur para recargar combustible cuatro veces, a la altura de Pozo Santo, porque no nos dejaban aterrizar en la base aérea de Pisco”, ríe ahora Wust.
CARETAS, en trance hipnótico, publica siete nuevas maravillas del territorio peruano, que se suman a las que aparecieron en esta misma sección la semana pasada. Copie/pegue en el buscador de Google Earth la coordenada que precede a cada reseña escrita por el propio autor y descubra el Perú.
¡Asómbrese y aventúrese!
Amplíe su conocimiento de la geografía del Perú y viaje por este hermoso territorio (cuando se pueda).

Península de Capachica, Puno 15°19.59’S 69°45.45’W Miles de pequeñas parcelas, irrigadas con las aguas del lago Titicaca y las lluvias de verano, dan cuenta de la antigua ocupación de los pucara y aymara, grandes agricultores que convirtieron las orillas del gran lago en un laboratorio natural para adaptar cultivos y lograr cosechas a alturas donde normalmente las plantas no logran desarrollarse.

Laguna de Chachas, Andagua, Arequipa 15°31.09’S 72°15.41’W Pocas lagunas tan bellas y singulares como la de Chachas. Sus aguas negras, teñidas por los sedimentos volcánicos, irrigan a fértiles campos que producen toda clase de cultivos de panllevar. Una de las particularidades de este gran espejo líquido, situado a algunos pocos kilómetros de la localidad de Andagua, es que sus aguas desaparecen bajo tierra –en un lugar llamado Tragadero– para reaparecer decenas de kilómetros valle abajo y formar la laguna de Mamacocha, antes de verter su cauce al río Colca.

Paruro, Cusco 13°39.57’S 71°51.58’W Colinas reverdecidas por la estación de lluvias en las alturas de Paruro, Cusco. La llegada de las tormentas marca el tiempo de abundancia –tan intenso como efímero– en los Andes. Las parcelas de altura regalan sus cosechas, los rebaños de llamas y alpacas reciben a sus crías y todo en la puna parece tomarse un descanso para la renovación y la esperanza.

Pucusana, Lima 12°28.42’S 76°47.55’W Una hermosa bahía protegida del viento y las olas fue elegida para crear ahí una antigua caleta de pescadores (quizás incluso con mil años de antigüedad). Su belleza ha continuado atrayendo a bañistas y amantes del mar y la pesca hasta convertirla en una de las playas más populares e icónicas del sur chico. El nombre Pucusana provendría de las voces pucu, del quechua, que significa rojo, y sana, del aymara o wari, que significa abundancia de algo, en clara alusión a la tonalidad de los cerros rojizos por el óxido de fierro que rodea la caleta.

Barrio flotante de Belén, río Itaya, Loreto 03°45.53’S 73°14.51’W La Venecia de la Amazonía es, en realidad, una verdadera ciudad anfibia. Aquí los niños van al colegio en canoa y los peces nadan bajo las ventanas. Durante casi seis meses del año las crecidas del Amazonas inundan la boca del río Itaya y convierten en río las calles de este populoso distrito de Iquitos, dedicado al comercio.

Playón, Reserva Nacional de Paracas, Ica 13°57.52’S 76°16.17’W Los mismos vientos paracas que contribuyen a fertilizar las aguas de uno de los mares más ricos del planeta modelan la costa y trasladan enormes dunas de arena fina hasta las orillas del Pacífico. Se trata de Playón, una de las localidades que protege la Reserva Nacional de Paracas, creada en 1975 sobre 175 mil hectáreas de desierto y mar. Hace un par de años, con motivo de la producción del libro Paracas desde el aire, tuve la suerte de sobrevolar a bordo de un ultraligero esta parte de la costa y esperar la luz mágica del ocaso para capturar la belleza de este rincón que conozco como la palma de mi mano.

Los Mentirosos, isla San Gallán, Paracas 13°49.04’S 76°27.09′ El extremo norte de la gran isla San Gallán, al oeste de la bahía de Paracas, parece quebrarse en un sinfín de islotes y playas de arena blanca convertidos en hogar para una enorme colonia de lobos marinos chuscos. Sus aguas cristalinas hacen de este lugar un verdadero paraíso para la fotografía y la contemplación de la naturaleza. En la actualidad, la isla es un área restringida para la conservación de la fauna.