En el circuito cultural hay instituciones extranjeras que se han ganado el cariño y respeto del público. Tenemos el ICPNA, el Goethe Institut, el Centro Cultural de España, el Centro Cultural Peruano Japonés y el Centro Cultural Peruano Británico entre las más conocidas. Su radiación va más allá de la enseñanza del idioma, abarcando manifestaciones artísticas e intelectuales (además, todas ellas cuentan con bibliotecas maravillosas).
Pues bien, un subrayado especial merece la Alianza Francesa de Lima. Para empezar: este 2022 cumple 132 años de fundación. Otro dato más: en el mundo hay más de 800 sedes de la Alianza Francesa y la peruana (y sus respectivas filiales) —apunta— es la que más estudiantes tiene.
Su nuevo director, Frédéric Robinel —especialista en lenguas modernas, música y con 23 años de experiencia en gestión cultural—, tiene no pocos proyectos.

“Este año también se cumplen los 25 años de “Pasaporte para un artista” y haremos una gran exposición retrospectiva con el Museo de Arte Contemporáneo y la PUCP”, dice Robinel, en lo que vendría a ser una info que inmediatamente despertará la atención de los artistas peruanos, puesto que este programa ha sido un estímulo —clave, por decir lo mínimo— para muchos de ellos.
Robinel añade que “la tradición francesa por la cultura es fuerte y ese principio es lo que proyectamos en la Alianza Francesa. Por ejemplo, cuando se superaron las primeras restricciones sanitarias, decidimos ir con un fuerte programa de actividades. Y si regresan las restricciones, cancelamos. Lo peor que podemos hacer es esperar hasta que no pase nada y en esa espera muchas veces no haces nada”.
Palabras sustentadas en hechos: las presentaciones del festival de danza y teatro Temporada Alta, con artistas de primer nivel mundial. “Y haremos también grandes conciertos con lo mejor de la música francesa de hoy”.
Infatigables.